Por desgracia este último tiempo se está viviendo y registrando un aumento significativo en los casos de violencia escolar, más concretamente bullying. Situaciones en la que uno o más niños agreden, intimidan, humillan o acosan a una víctima se han visto con cotidianidad.
Actualmente el bullying es una conducta que se da en todas las culturas del mundo y debido al importante impacto que tiene en la vida del niño es muy importante detectarlo.
Prevenir y abordar la violencia es una responsabilidad y desafío para todos, pues requiere la revisión y transformación de los modos en que se convive cotidianamente.
¿Qué es la violencia escolar?
La violencia escolar se refiere a cualquier acción que implique agresión física, psicológica o emocional dentro del contexto educativo. Este tipo de violencia puede manifestarse entre estudiantes, de estudiantes hacia docentes o entre otros actores de la comunidad escolar. Uno de los casos más comunes es el bullying, que se caracteriza por el maltrato reiterado hacia una persona, generando un impacto negativo en su bienestar emocional y psicológico.
Este fenómeno ha ido en aumento, especialmente tras la vuelta a clases presenciales después de la pandemia, lo que ha generado una preocupación creciente en las comunidades escolares. La violencia escolar no solo afecta a la víctima, sino también a los testigos y a la dinámica general del ambiente educativo.Causas y consecuencias de la violencia escolar
La violencia escolar es un fenómeno cultural que puede tener diferentes causas y sobre el cual influyen múltiples factores, se caracteriza por el uso ilegítimo de la fuerza y el poder, y tiene como consecuencia el daño a la otra persona, a nivel físico o psicológico.
Al ser un hecho cultural, se entiende que la violencia es transmitida y aprendida, sin embargo esta misma razón abre la posibilidad de enseñar otras formas de relación que sean pacíficas y de prevenir su aparición o uso en la convivencia escolar.
En el ámbito escolar, los conflictos mal resueltos, o que no son abordados a tiempo, o la agresividad descontrolada son motivos que pueden llevar al uso de la violencia como un modo de relación aprendido.
Efectos de la violencia escolar
La violencia entre escolares puede tener graves consecuencias a corto y largo plazo para todos los involucrados. Algunos de los principales efectos incluyen:
Efectos en la salud mental: La víctima puede desarrollar problemas de ansiedad, depresión, baja autoestima e, incluso, pensamientos suicidas.
Rendimiento escolar: Los estudiantes afectados suelen mostrar una disminución en su rendimiento académico debido a la distracción, el miedo o la pérdida de motivación.
Impacto en la convivencia escolar: La violencia genera un ambiente tóxico que afecta las relaciones interpersonales dentro del aula y en la escuela en general.
Consecuencias físicas: Las agresiones físicas pueden dejar lesiones que requieren atención médica.
Efectos a largo plazo: Los niños y adolescentes que experimentan violencia escolar pueden cargar con secuelas emocionales hasta la adultez, lo que podría influir en su desarrollo social y profesional.
¿Cómo se manifiesta la violencia escolar?
Se han identificado distintas manifestaciones de la violencia escolar. Cada una varía dependiendo del tipo de fenómeno y actores involucrados:
Agresividad
Se refiere a un comportamiento defensivo natural que se utiliza como una manera de enfrentar situaciones del ambiente o de la convivencia que son percibidas como riesgosas o amenazantes.
Agresiones físicas
Se refiere a aquellas peleas que incluyen contacto físico entre los participantes y que surgen debido a alguna diferencia, descontrol o conflicto mal resuelto
Violencia psicológica o emocional
Se refiere al uso de descalificaciones, amenazas, insultos o burlas hacia algún miembro de la comunidad,ya sea de manera presencial o indirecta (por ejemplo, a través de rayados en el baño o en murallas), o de manera virtual (por ejemplo, a través de redes sociales).
Violencia social
Se produce a través de los rumores malintencionados, revelar secretos o aspectos de la vida íntima de las personas, aislar a un miembro del grupo, hablar mal de otras personas.
Violencia contra la infraestructura o los espacios escolares
Se trata de aquellos actos en que se produce un daño deliberado al edificio, el mobiliario, materiales, recursos u otros elementos que forman parte del espacio escolar.
Acoso escolar
Una de las formas de violencia que más impacto causa en la actualidad es el acoso, conocido también como bullying o matonaje. Ha sido definido como “toda acción u omisión constitutiva de agresión y hostigamiento reiterado, realizada dentro o fuera del establecimiento educacional por estudiantes que, en forma individual o colectiva, atenten en contra de otro estudiante, valiéndose para ello de una situación de superioridad o indefensión del estudiante afectado, que provoque en este último, maltrato, humillación o fundado temor de verse expuesto a un mal de carácter grave, ya sea por medios tecnológicos o cualquier otro medio”
Ciberacoso
Conocido también como ciberbullying, consiste en una forma de violencia similar al acoso escolar, pero que utiliza medios tecnológicos como redes sociales, internet u otros espacios virtuales por lo que su difusión e impacto en todos los involucrados y en la convivencia general de la comunidad es mucho mayor.
¿Cómo prevenir la violencia escolar?
La prevención de la violencia escolar requiere el compromiso de toda la comunidad educativa, incluyendo estudiantes, docentes, padres y directivos. Algunas estrategias efectivas son:
Promoción de la educación emocional: Fomentar en los estudiantes la empatía, la gestión emocional y el respeto mutuo desde una edad temprana.
Fomento de la convivencia escolar: Crear ambientes escolares positivos donde se refuercen los valores de respeto, inclusión y tolerancia.
Acciones de sensibilización: Realizar charlas, talleres y campañas educativas sobre los efectos de la violencia escolar.
Capacitación de docentes: Los profesores deben recibir formación en la detección y abordaje de situaciones de violencia, para actuar de forma oportuna.
Participación de los padres y apoderados: Los padres deben estar atentos a las señales de alerta en sus hijos y mantener una comunicación abierta con ellos y con el colegio.
Canales de denuncia: Contar con sistemas seguros y confidenciales para que estudiantes, padres y docentes puedan denunciar situaciones de violencia escolar.
En conclusión, la violencia entre escolares es una problemática que requiere atención inmediata y acción conjunta por parte de toda la comunidad educativa. La prevención, la educación emocional y la detección temprana son claves para evitar sus consecuencias negativas. Si te ves envuelto en una situación de violencia escolar o tienes un familiar que lo está, no dudes en buscar ayuda profesional. En Centro Médico CEAPSI contamos con especialistas con más de 15 años de experiencia en trabajo con niños(as) y adolescentes, abordaje de casos con depresión infantil, dificultades conductuales, evaluación y tratamiento de situaciones de maltrato grave. Conoce a nuestros profesionales de la salud y reserva una hora online ingresando aquí.
