El sistema inmunológico cumple un rol esencial: defender nuestro cuerpo de virus, bacterias y otras amenazas. Pero, ¿qué ocurre cuando este sistema comienza a fallar? En esos casos, el inmunólogo se convierte en una pieza clave del equipo médico. En este artículo te explicamos en qué consiste esta especialidad, qué enfermedades trata y en qué momento es necesario consultar con uno.
¿Qué es la inmunología?
La inmunología es la rama de la medicina encargada del estudio, diagnóstico y tratamiento de los trastornos del sistema inmune. Este sistema es responsable de protegernos de infecciones, pero también puede verse afectado por deficiencias, hiperreactividad o desequilibrios que desencadenan enfermedades.
Los inmunólogos se dedican a comprender y tratar esas alteraciones, trabajando frecuentemente en conjunto con otras especialidades médicas como pediatría, dermatología, neumología o reumatología.

¿Qué enfermedades trata un inmunólogo?
Alergias alimentarias y respiratorias
Reacciones exageradas del cuerpo ante sustancias como alimentos, polvo, polen, entre otras.
Asma alérgica
Infecciones recurrentes
Enfermedades autoinmunes
Inmunodeficiencias primarias o secundarias
¿Cuándo acudir a un inmunólogo?
No siempre es fácil identificar cuándo los síntomas están relacionados con el sistema inmune, pero algunas señales de alerta pueden ser:
- Episodios frecuentes de fiebre o infecciones.
- Síntomas persistentes tras la exposición a ciertos alimentos, ambientes o animales.
- Diagnóstico de enfermedades autoinmunes o antecedentes familiares de estas.
- Reacciones alérgicas severas o repentinas.
Si presentas alguno de estos síntomas, consultar con un inmunólogo puede ayudarte a comprender qué está ocurriendo en tu cuerpo y cómo manejarlo.

Inmunología en CEAPSI
En CEAPSI, nuestros inmunólogos están capacitados para evaluar tanto a niños como adultos, realizando exámenes especializados y entregando tratamientos personalizados según cada caso. Nuestro enfoque interdisciplinario nos permite acompañarte integralmente para mejorar tu calidad de vida.
No normalices tus síntomas. Haz tu consulta con un especialista en inmunología y da el primer paso hacia un diagnóstico certero.